Liga Grinsola

Los Viriviris arrasan y se llevan una Supercopa de mucho nivel

Para ser campeón hay que tener esa pizca de suerte a tu lado, y los Viriviriflantas demostraron que cuentan con ese azaroso aliado. El primer partido fue un choque apasionante y muy igualado, con varios cambios de dominio a lo largo del mismo. Fueron los de Sage Holmes los que golpearon primero; pero rápidamente Dragón Atómico se puso el mono de trabajo y, liderados por Salva Sevilla, lograban llevar el encuentro al descanso en ventaja (15-9), a pesar de tener las apuestas en contra. Esos seis puntos de diferencia espolearon a los de Ataquer, que nada más salir de los vestuarios consiguieron volver a empatar la eliminatoria gracias a la victoria de la Real Sociedad, llegando a un tramo final apasionante en el que aún quedaban muchos jugadores importantes de Sevilla, Osasuna y Celta por puntuar.

Los de Pirrín lo intentaron y casi lo logran en dos ocasiones: Diego Carlos tuvo un remate clarísimo que sacó el portero del Getafe; mientras que En-Nesyri consiguió el primer gol del encuentro… que sería anulado por un fuera de juego milimétrico. Ahí llegaría el turno de Lamela, que salía desde el banquillo y conseguía enchufar un rebote para lograr, ahora sí, el primer y único gol de la ida: los Viriviris conseguían volver a ponerse en ventaja y el empate entre Osasuna y Celta permitía que este resultado se mantuviese durante el tiempo de descuento. Era un gran resultado para el conjunto de Sage Holmes, que además había conseguido una amplia puntuación como visitante que le podría beneficiar en caso de empate en el resultado global.

En el partido de vuelta, Dragón sabía que sus opciones pasaban por tener un comienzo arrollador, meter el miedo en el cuerpo a los rivales y realizar un partidazo para remontar la diferencia; y lo hicieron todo bien, pero los de Sage Holmes supieron responder con contundencia a cada uno de los golpes que propinaba el equipo de Pirrín. Los goles de Wass y Dani Rodríguez permitían a los Viriviris aguantar el arreón inicial, y en el peor momento del encuentro para el equipo local, que contaba con una baja y dos suplencias, a pesar del gol de En-Nesyri que apretaba muchísimo el marcador global, salieron Portu y Lamela para sostener al equipo verde y dejar un final de partido bastante tranquilo.

Y así fue, a pesar de los intentos de Isi Palazón y el negativo de un Braithwaite que ha tenido una Supercopa para olvidar, el gol final de David García permitía a los Viriviriflantas llevarse el segundo partido llegando a los 40 puntos y cerrar una actuación extraordinaria que les lleva al segundo título oficial de su historia grinsola, doce años después de su fundación. Dragón Atómico se fue con la amargura de no haber sido capaz de superar al campeón de liga; pero con el orgullo de haber peleado a un nivel magnífico ambos partidos. Seguro que estos dos equipos nos harán disfrutar de lo lindo a lo largo de la temporada si logran mantener el nivel demostrado en estos encuentros.